ARCADIA. 2017, Paul Wright

Según la mitología clásica, Arcadia simboliza el territorio de la felicidad, es el paraíso en la tierra que inspiró primero a griegos y después a renacentistas y románticos. El director Paul Wright establece en su segundo largometraje una analogía entre su país, el Reino Unido, y Arcadia, empleando imágenes de archivo. Se trata de esbozar la historia reciente de una nación a través del found footage o metraje encontrado proveniente de la televisión, grabaciones documentales, filmotecas... un torbellino audiovisual que el montaje de Michael Aaglund logra domesticar y dar forma en la pantalla de manera bella e hipnótica, en torno a la idea de que a pesar de los conflictos bélicos y de los inconvenientes del avance industrial, prevalece la esperanza y la comunión con la naturaleza.

Arcadia posee un carácter experimental que la convierte en una obra única, es un ejercicio de vanguardia narrativa que carece de una estructura convencional y se entrega al flujo constante de planos de diversas calidades y texturas. La suma de todos ellos completa un mosaico que precisa la intuición del público para ser asimilado, sin necesidad de ejercicios intelectuales complejos porque, detrás de su apariencia abstracta, el film resulta sencillo: consiste en describir mediante la yuxtaposición de imágenes y sonidos el ideal de Arcadia como meta aspiracional, el regreso a la esencia. Hay cierta reiteración en este concepto que Wright practica queriendo dejar claras sus intenciones, esta es la debilidad que se le puede reprochar a un conjunto por lo demás fuerte y capaz de deslumbrar por igual los ojos y los oídos.

El apartado sonoro cobra enorme importancia por medio de recuperar fragmentos de locuciones del pasado que abren cada uno de los capítulos en los que se divide la película. Pero sobre todo, Arcadia crece gracias a la música compuesta para la ocasión por Will Gregory y Adrian Utley, un derroche de inspiración conjunta perfectamente acompasada al montaje. En definitiva, Arcadia es una pieza artística que propone un modo distinto de contar los hechos y de explorar un lenguaje y un lugar más metafórico que descriptivo, y más cinematográfico que físico.