MOTHER. "Madeo" 2009, Bong Joon-ho

Da igual el género al que pertenezcan, las películas de Bong Joon-ho siempre están teñidas de un humor muy particular que las vuelve reconocibles. Ya sea desde el thriller rural (Memories of murder), el cine de monstruos (The host) o la fábula distópica (Snowpiercer), sus historias evidencian el absurdo y las contradicciones del comportamiento humano. Mother recrea el mito de la madre coraje que es capaz de hacer cualquier cosa por salvar a su hijo, más aún cuando este padece una discapacidad mental y es señalado como culpable de un crimen sucedido en una pequeña población.

Una vez más, la galería de personajes resulta singular. El autor no se centra solo en la figura de la madre abnegada, ya que cuestiona todos los modelos posibles de autoridad, poder y referentes sociales. Todo ello sin acritud ni nihilismo, porque Bong Joon-ho parte del esperpento y utiliza la pantalla como un espejo deformante de los males que acechan al público. Este traga la medicina cuyo sabor amargo es endulzado con las oportunas dosis de comedia, ya que Mother es un film divertido, grotesco pero divertido. Hay personajes que ahogan sus frustraciones en alcohol, otros que aplacan su soledad con sexo arbitrario, policías incompetentes, ladrones de poca monta... en suma, una fauna de seres que caminan en todo momento entre la fuerza y la vulnerabilidad, entre la decisión y el caos.

Ahora bien, si todos los elementos se conjugan y adquieren sentido es gracias a las capacidades narrativas de Bong Joon-ho. Es admirable su habilidad para hacer evolucionar el relato empleando un lenguaje cinematográfico elocuente y de gran dinamismo, que alterna con inteligencia el tamaño y la angulación de los planos, y que elige emplazamientos de cámara acordes a las necesidades de la ficción. El cineasta surcoreano trabaja por primera vez con Hong Kyung-pyo y Jinmo Yang, director de fotografía y montador respectivamente, quienes realizan una labor minuciosa y creativa que contribuye al perfecto acabado técnico del film. El equipo artístico tampoco desmerece, integrado por un plantel de actores preciso y bien conjuntado.

Con un carácter más íntimo que sus otras películas, Mother muestra el dominio de la puesta en escena de Bong Joon-ho y su talento para desarrollar en imágenes todas las posibilidades que ofrece el guion, escrito por él mismo junto a Park Eun-kyo. Basta ver la secuencia final con el viaje en autobús para constatar el potencial de fabulación y metáfora que posee el director. Sin duda, uno de los más dotados surgidos en Oriente durante las últimas dos décadas.