LET IT BE. 1970, Michael Lindsay-Hogg

La trayectoria de los Beatles transcurrió durante una década en la que participaron en cuatro largometrajes de cine, además de numerosas grabaciones de televisión. Sus películas iban del free cinema de A Hard day's night a la animación psicodélica de Yellow submarine, pasando por el delirio pop de Help! En 1970, la banda de Liverpool publica el álbum Let it be acompañado de un documental que recoge las sesiones de grabación, un proyecto impulsado por Paul McCartney en las horas más bajas del grupo, un año antes de disolverse, y que es capturado por las cámaras de Michael Lindsay-Hogg a lo largo de cincuenta y cinco horas de filmación. El director selecciona el material que da forma a una película de ochenta minutos, cuya distribución ha sido muy escasa debida a los reparos de los miembros supervivientes de la banda, quienes han expresado su disconformidad con el resultado que muestra la pantalla. El argumento oficial es que el montaje de Lindsay-Hogg es demasiado parcial y revela las desavenencias y tensiones que se viven en el estudio de grabación, rompiendo el ideal de camaradería y felicidad que identifica a los Beatles. Por lo tanto, sus admiradores han encontrado siempre dificultades para ver Let it be a causa de esa actitud paternalista que impide que los niños asistan a las discusiones de los mayores, no vayan a pensar que ya no se quieren.
En realidad, todo esto es producto de la mitología que despierta la banda. La película no contiene situaciones que no suelan formar parte de cualquier proceso creativo elaborado en equipo, más aún teniendo en cuenta la intensidad del tiempo compartido. La leyenda en torno a los Beatles ha impregnado Let it be de una connotación negativa que magnifica la disparidad entre Paul y George acerca de unos acordes de guitarra, por ejemplo, o la presencia contante en el estudio de Yoko Ono. Es bien sabido que los Beatles pasaban por entonces por momentos muy complicados, con deserciones temporales, falta de comunicación, lucha de egos, drogas... Son aspectos que estaban ahí, pero que apenas asoman en el film. Al contrario, predominan los momentos de cohesión, como la parte de jam session en la que interpretan un repertorio de canciones ajenas. Este segmento del film responde a la intención de recuperar la inmediatez y la naturalidad de los primeros tiempos, una idea verbalizada por McCartney en un par de ocasiones y que se concreta en la famosa actuación final en la azotea de los estudios Apple Corps. La primera mitad del Let it be presenta grabaciones, ensayos y esbozos del que será su siguiente disco, Abbey Road. Las circunstancias invirtieron el orden de publicación de estos dos trabajos e imprimieron en el subconsciente colectivo la sensación de que Let it be es un álbum de carácter casi fúnebre, el epitafio de una carrera genial.
Lo cierto es que ver hoy Let it be supone un placer inmenso para los seguidores de los Beatles y para cualquier aficionado a la música en general. La película está rodada con el estilo fly on the wall, es decir, sin que la acción se vea afectada por la presencia de las cámaras, que permanecen distantes en situación de testigos. Esto no permite alardes cinematográficos pero sí aporta verosimilitud y objetividad, dejando la asunción del punto de vista para la fase de montaje. Una técnica que aspira a la invisibilidad y que Lindsay-Hogg emplea aprovechando que existía cierta complicidad con los Beatles, ya que anteriormente habían trabajado juntos. Pero tras ver el documental es inevitable pensar en cómo sería el resultado de haber contado con otro director y otro montaje, una incógnita que al parecer tendrá pronto respuesta con motivo del 50 aniversario de Let it be. Será interesante comparar ambas películas y descubrir el nuevo material hasta ahora desconocido, algo semejante a la apertura de un tesoro enterrado durante medio siglo.
A continuación, una de las canciones incluidas en el largometraje, en directo para los viandantes de Londres desde la azotea de la calle Savile Row. Saquen el reclinatorio y suban el volumen: